Ponte en pie

Tirada en el suelo durante varios días, sin saber que hacer ni que decir, al fin se levantó, se había sumergido tanto en sus pensamientos que no sabía ni el día en el que estaba.

Todos tenemos problemas en esta vida, nuevos retos que se hacen difíciles, y circunstancias que tenemos que pasar porque es lo que toca, pero hay que seguir adelante, pues quedarse en el suelo no sirve de nada, tener el corazón partido en dos partes nos sirve para saber que una vez que se sane será mas fuerte.

Quizás hoy me sienta optimista.

Todos necesitamos estar solos

Y andó sóla por la carretera, sin ninguna preocupación en la cabeza, mirando el paisaje, con su abrigo, su jersey de cuello vuelto y sus guantes de lana raidos. Lejos, tan lejos que girando la vista atrás ya no veía su pueblo, su casa, su familia. En ese momento aunque suene extraño se sintió feliz. Siempre se había imaginado una vida llena de aventuras y alejada de la rutina. Sabía que tarde o temprano tenía que volver, pues la echarían de menos. Pero era libre, junto con la naturaleza y los árboles que solo la susurraban al oído lo que ella quería escuchar...nada..

se sintió viva, cojió aire e intento guardar ese sentimiento en algún lugar donde permaneciese siempre y volvió a su hogar, con sus hijos y sus nietos.

Todos necesitamos estar sólos de vez en cuando.

Estar sólo no es casualidad

Algún día lejos de este sentimiento que ahora me mata por dentro me reire. Me alegraré por los malos momentos que me hacen más fuerte día a día y volveré a soñar con que los días y las noches no sean tan amargos como los de este otoño. Según las estadisticas esta es la época del año en la cual hay mas depresiones y suicidios, las personas nos ponemos mas melancólicas, quizás sea esa sensibilidad que nos caracteriza, sin más preámbulos..me declaro hipersensible.

Sin ser tan pesimista pensaré, que algún día llegará mi momento de felicidad, pues tengo claro que esta como tal no existe, ¿O alguien puede decir que es feliz las 24h del día? si es asi mis mas sentidas felicitaciones, aunque lo dude, solo de pensarlo me causa envidia.

Claramente estar sólo no es casualidad, pues hasta la persona menos agradaciada que nos podamos encontrar tiene derecho a enamorar y a enamorarse, y es que este tema va mucho más haya del físico, aunque parezca mentira en esta sociedad tan superficial en la que vivimos, todavía se encuentra el amor en las calles y en los hogares. Va más alla de todo eso, simplemente hay algo que tengo o que no tengo, quizas ese sea el motivo, que me falte algo, no se todavía exactamente qué, quizas mi manera de pensar o de ser, o cualquier ridículo motivo por el cual estoy sola, por el cual todos los hombres que aparecen en mi vida me acaban dejando tirada, y ese es un tema en el que entraré mas alante, pues esto no siempre ha sido así. Deje pasar una oportunidad, creo que nadie me querra tanto como el lo hizo algún día, fueron los mejores momentos y a la vez algunos de los peores de mi vida. Me quedo con los buenos y me arrepiento de muchas cosas que hice, y no tanto de otras.

El corazón sólo volverá a ser el mismo arriesgándose a romperse de nuevo. El mio ya esta destrozado, y aún asi me levanto cada mañana con una mínima esperanza.

Noches oscuras

Como cada noche, cansada se sentó junto a la ventana, a la luz de la luna, que brillaba con especial interés esa noche.Seria y triste, como ella era, contempló la calle vacía durante unos minutos, tan oscura, tan desprotejida, tan oculta,e insegura. Sintió escalofríos. Penso vagamente en un recuerdo de verano, que nada tenía que ver con aquella escena,pero, para que engañarse, No podia negar que la calle era como ella, y por eso a esas horas de la noche, estaba vacía, al igual que ella estaba sola.

Duele el otoño

Una mañana más, la luz entró por la ventana amargando mis sueños, sueños descolocados y sin sentido que jamás se cumplirían, pero tan reales…que a mitad de la noche me despertaban escalofríos soñando con la nieve, tan reales que me daba el viento en la cara de la brisa marina, tan reales que tú estabas allí, me entendías, me abrazabas y sentías cierto sentimiento, lo supe por tu mirada. Y así era feliz, viéndote cada noche en un sueño abstracto. Y sueño a sueño empecé a odiar la luz de la mañana, sin olvidar que solo eras parte de mi imaginación, que nada tenía que ver con la realidad, que éramos dos mundos opuestos en un mundo al revés.

Necesito droga y amor

Y allí estaba yo, sola, en medio de la nada en ese momento, sin saber dónde mirar, sin saber dónde encontrar una respuesta a lo que me sucedía, y llegó, como hoja que cae en otoño, como copo que cae frío en la nieve... llegó, y me abrazó como si no le importase otra cosa, como el cielo naranja que abraza la ciudad al atardecer, allí estaba él, cálido, sincero, como me prometió, no éramos nada más que dos cuerpos unidos tras un sentimiento oculto. ¿Amor? No creo, no era amor, pero bastaba con lo que fuese, porque llenaba el corazón de paz y tranquilidad, como el sol que sale estropeando un día más, la noche oscura de nuestros corazones. Esa noche dormí acompañada aunque en lo más profundo de mi, estaba sola.

Quizás las ansias de volar se calmen con el tiempo, siempre he pensado que era libre, y lo bastante fuerte para aguantar tantas cosas...pero no, no soy libre ni mucho menos pues mi corazón es tirano y yo sólo soy un súbdito, vivo para complacerle, para que no lo pase mal solo, y para sanarle día a día, porque duele, porque esta roto, porque faltan piezas que se han ido perdiendo con el paso del tiempo. No soy libre pues soy esclava de mis sentimientos y de mis instintos que me atormentan como si me odiasen. Un segundo en mi posición sería suficiente para hacerte daño.

..

En aquel sitio rebosaba la oscuridad, latían venas oscuras al compás de un sonido llamado latido, era acelerado el paso de su marcha, cada vez más, desde otra perspectiva, mirando por la ventana lo vi claro, era ella, que una noche más lloraba sobre la almohada, en ese momento lo entendí todo, tenía roto el corazón. La herida se cerró al paso del tiempo, no obstante quedaron grietas y un recuerdo amargo de algo en lo que nunca más creería… amor.

El dolor que siente un corazón herido no puede compararse con ninguna otra sensación, late deprisa, vacío, sin vida, sin esperanza. No volverá a confiar en nada ni en nadie que pueda volver a perjudicarle, y únicamente volverá a ser lo que era con la ilusión de un nuevo comienzo, arriesgandose a herirse de nuevo, mentira, no volverá a ser lo que era.